Hace unos años avanzaron en nuestro país, los gurúes, escritores e influencer donde nos venden que debemos estar felices y casi nuestra obligación de estar alegres.
Tenemos frases por doquier, en las redes, en camisetas, en lemas en las calles, en publicidades de productos, todo el mundo nos bombardea con ¡felicidad!, «hoy puedes lograr lo que te propongas», «sino eres feliz soltalo», «un millón de razones para ser feliz. ¡Sonríe!», realmente el mundo es maravilloso, todo esta a la vuelta de la esquina, pero esperemos un momento ¿Qué sucede si no consigo lo que me propongo, sino tengo ganas de sonreír o si no soy feliz? ¿debo hacerlo? o esperar que alguien me de ese consejo, me «obligue» a hacerlo y así entrar en su escala social, cuando no logro ser feliz como dicen estos lemas y frases es cuando viene la frustración.
La felicidad vende mucho, millones de pesos o dólares en venta de libros, influencer que se hacen millonarios pregonando que tenés que estar bien y demostrar tu felicidad! en cambio la tristeza esta mal vista, vapuleada, no es «chick», casi es una enfermedad, este hecho hace que debamos esconderla, maquillarla, llevarla a un rincón profundo de nuestro ser, en la sociedad actual esto es un triunfo, seria como el bien vence el mal, este mundo ficticio es a veces peligroso, ¡que te dejen de decir como debes estar! no es malo, sos vos tomando tus riendas, dejar de seguir en la redes a tanto hue**n, tanto gurú chanta, sin importar que digan los demás y viví, de la manera que quieras hacerlo en el momento que quieras hacerlo.
Esta nueva corriente que lleva muchos años imponiéndose, nos dice que debemos demostrar felicidad creérnosla antes de ser normales, tener estos sentimientos que puede tener un ser humano (por algo vinimos con ellos) el miedo, la tristeza, la ansiedad, están en nuestro ADN a veces para aprender, para vivirlos, no para esconderlos y fingir.
El fracaso deber ser una de las lecciones mas valiosas que podemos tener, nuestro duelo y reincorporarnos, nos hace mas fuertes, en cambio en la sociedad actual nos obliga a que no se puede estar triste por esto, debo estar feliz 24/7 ¿Cómo podemos aprender si solo nos obligan a ser felices?
Reconocer que uno no es feliz da vergüenza, es como si no hubiésemos hecho bien las cosas; los infelices se han convertido en una mala compañía.
Lo importante es no parar, de eso se trata «Lo que esta por llegar es mejor que lo que se fue» todos compramos ese sentimiento de esperanza, porque el humano de por si, no suele hacerse cargo, es casi una manifestación de la cobardía del ser humano para analizarse, es el reconocimiento de nuestro atraso, las emociones no son malas son un filtro de aprendizaje de la vida.
En la vida existen cosas malas debemos estar preparados y nuestras emociones tristeza, depresión y soledad nos hacen mas fuertes, siempre teniendo un equilibrio, si a un niño solo le enseño lo positivo lo estaría criando para un mundo que no existe, de la vida también es parte la muerte, nadie puede discutirlo, ese es el famoso Yin y Yang ese equilibrio, si estas triste tener el derecho a estarlo y no esconderlo con una foto en Instagram, si fracasaste tenés el derecho a hacer tu duelo, estas y todas las emociones son de aprendizaje, de empatía, sentirlas nos hace mejores seres humanos, sino estamos preparados para entender esto, es que no entendimos la vida.