Aquellos que tienen la suerte de poder construir su propia muchas veces sienten que no terminan nunca de construir ¿Puede ser? ¿Estoy en lo correcto? Ok. Mas alla de la frustración por los tiempos que lleva levantar una casa no es más que una sensación y en algún punto termina y los propietarios se instalan (cuenta la leyenda, yo siempre alquile).
Sarah Winchester fue la heredera de la fortuna de su esposo William Wirt Winchester creador del rifle de repetición Winchester. Al morir William heredo mucha, mucha, pero mucha plata (onda compléteme el taque con la nafta cara y quédese con el cambio). Ella empezó a sentir cosas extrañas y un día visito a una médium en Boston.
¡Bienvenidos a la parte que me encanta!… CUENTA LA LEYENDA QUE… La médium le informo a Sarah que estaba maldita y que era perseguida por las almas de las personas que habían sido asesinadas por las armas Winchester invento de su marido (hablame de herencias) y que la única manera de que la dejen en paz era construir una mansión en un lugar para que los espíritus la habiten, pero había una clausula mas en el contraro con el mas allá.

La mansión nunca debería estar terminada, si concluía la obra Sarah moriría inmediatamente. Según la creencia popular la casa estuvo en constante construcción durante 38 años, consta de 160 cuartos, incluyendo 40 habitaciones, 467 puertas, 6 cocinas, 52 tragaluces y 2 salones de baile (uno de ellos sin terminar). También incluía 47 hogares, 17 chimeneas (y restos de otras 2), más de 10.000 paneles de cristal, 2 sótanos, 3 ascensores y lámparas de gas que se encendían con un botón. Contaba con solo una ducha y dos espejos en toda la casa. Debido a la artritis que padecía la señora Winchester, se instalaron muchas escaleras especiales muy poco empinadas para que pudiera desplazarse fácilmente por su hogar. La estructura de la casa es bastante atípica, ya que en ella se pueden encontrar escaleras que no llevan a ninguna parte, puertas pequeñas y puertas grandes que al ser abiertas llevan a paredes o al vacío, así como ventanas ciegas que dan a dentro de la misma casa.
Sarah murió el 5 de septiembre de 1922 yo le agregaría… esperando la habilitación municipal para construir otro cuarto que nunca llego porque los funcionarios municipales estaban todos de vacaciones (pero esto realmente nunca paso, porque Sarah no vivió en Argentina).